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Tierra Querida Magazine

Santa Marta, 500 años de historia viva junto al mar

Santa Marta

Hoy, 29 de julio de 2025, Santa Marta celebra medio milenio desde su fundación. Una ciudad que no solo lleva el título de la más antigua de Colombia —y la segunda de Sudamérica—, sino que también ostenta con orgullo un legado que se entreteje entre la historia, la resistencia, el mestizaje y la belleza natural.

Un puerto fundado entre sueños y tensiones

Fundada el 29 de julio de 1525 por el conquistador Rodrigo de Bastidas, Santa Marta fue la puerta de entrada de la colonización española al norte del continente suramericano. Su nombre honra a Santa Marta, cuya festividad se conmemora justamente en esta fecha dentro del calendario católico.

Desde entonces, ha sido testigo del choque y la mezcla de culturas: los pueblos indígenas tayrona, con su sabiduría ancestral; los colonizadores europeos, con sus intereses de conquista; y las comunidades africanas esclavizadas que trajeron consigo su resistencia, espiritualidad y fuerza. De ese mestizaje complejo nació una ciudad única.

Territorio de ancestros, espíritu de montaña

Más allá de su centro histórico o su bahía emblemática, Santa Marta es también el hogar de uno de los sistemas espirituales más poderosos del continente: la Sierra Nevada, corazón de los pueblos indígenas Kogui, Wiwa, Arhuaco y Kankuamo, descendientes directos de los Tayrona. Para ellos, Santa Marta no es solo una ciudad: es parte del equilibrio sagrado del universo.

Este hito de los 500 años es también una oportunidad para reconocerlos como guardianes de la tierra, como pueblos milenarios cuya sabiduría ha resistido cinco siglos de transformación, colonización y olvido.

Cuna de historias, legado de libertadores

Santa Marta fue el último lugar donde respiró el Libertador Simón Bolívar, quien falleció el 17 de diciembre de 1830 en la Quinta de San Pedro Alejandrino, hoy lugar de memoria nacional. Su paso por esta tierra dejó una huella imborrable que convierte a Santa Marta en epicentro simbólico de la historia de la independencia suramericana.

Más que playas: una ciudad que late

Hablar de Santa Marta es hablar de sus paisajes, sí: del Parque Tayrona, del Rodadero, de Taganga o Minca. Pero es, ante todo, hablar de su gente: hospitalaria, resiliente, alegre. De sus pescadores, artesanos, cocineras, músicos, guías, líderes comunitarios, académicos y jóvenes que luchan por un desarrollo más justo y sostenible.

En estos 500 años, Santa Marta se reinventa. Hoy, la ciudad enfrenta desafíos como el cambio climático, el crecimiento urbano, la protección de sus ecosistemas y la preservación de su identidad. Pero también vive un renacer cultural, turístico y económico impulsado por la creatividad de su gente.

Una celebración para honrar el pasado y mirar al futuro

Este aniversario no es solo una conmemoración histórica. Es un llamado a reconocer el valor profundo de este territorio, a escuchar sus voces diversas y a apostar por un futuro donde lo ancestral, lo natural y lo urbano dialoguen en armonía.

Desde Tierra Querida, celebramos a Santa Marta con profunda admiración. Porque 500 años no se cuentan todos los días, y porque esta ciudad —con su sol ardiente, su mar que canta y su montaña sagrada— seguirá inspirando a Colombia y al mundo.

¡Feliz cumpleaños, Santa Marta!
Que este nuevo siglo te encuentre más viva, más consciente y más amada que nunca.

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