Bogotá, una herencia colonial que hoy brilla en Latinoamérica

Una ciudad vibrante de 485 años es hoy el atractivo para más de 12 millones de turistas al año.

Para tener 485 años, Bogotá es una ciudad con la energía de un adolescente. Es vibrante. Por sus calles circulan colombianos provenientes de todas sus regiones y ciudadanos del mundo que llegan para encontrar nuevas oportunidades, disfrutar de sus paisajes en medio de un clima de primavera y para constatar el porqué ese creciente interés global en el país  que se desbocó tras la película de Disney, Encanto. La cinta se quedó corta.

Las lomas que rodean esta urbe le dan un paisaje sin igual, sus 2.600 metros  sobre el nivel del mar generan en quien la recorre por primera vez, una sensación de retar al cuerpo y su arquitectura, marcada por el ladrillo rojo, dota a la ciudad de un carácter que la diferencia el resto de Latinoamérica. Es sinuosa, misteriosa y nunca decepciona cuando se le da la oportunidad de conocerla.

Desde 1538, cuando Gonzalo Jiménez de Quesada decidió construir 12 pequeñas casas, son muchas las transformaciones y evoluciones que hoy llevan a Bogotá a ser una de las ciudades de Latinoamérica más importantes. Más allá de sus cerca de 8,5 millones de habitantes, una de las más pobladas de la región, la ciudad es sede de muchas multinacionales por su ubicación estratégica en el continente. Se suma una amplia oferta cultural, gastronómica y de entretenimiento al nivel de las capitales más importantes del mundo, lo que le ha permitido ubicarse como uno de los destinos de Latinoamérica más interesantes para grandes eventos.

Quienes se han atrevido a conocer a la que algún día fue denominada la ‘Atenas sudamericana’ terminan amándola y siempre quieren volver. Nunca habrá tiempo suficiente para conocerla y recorrerla en su totalidad. No es para menos Bogotá ofrece entretenimiento, espectáculos, aventura y naturaleza de todo tipo y para todas las edades.

Si se anima a recorrerla por su emblemática Carrera Séptima puede partir desde el sector de La Candelaria, uno de los barrios más antiguos de la ciudad, con su característica arquitectura colonial que se mezcla imponente con construcciones republicanas. Su paso por la Plaza de Bolívar es obligatorio para conocer desde una posición privilegiada las estructuras de los poderes político, legislativo, de justicia, ejecutivo distrital  y religioso. Sobre sus adoquines y al lado de la estatua de Bolívar que ha sobrevivido siglos a marchas, enfrentamientos y al paso de la historia de Colombia, puedes recorrerla en la dirección del reloj y reconocer la Catedral Primada, el tradicional colegio San Bartolomé, el Capitolio Nacional donde sesionan los congresistas, el Palacio Liévano, sede de la Alcaldía y el Palacio de Justicia.

Avanzar hacia el norte por el otrora Camino Real permite apreciar la evolución urbana de la ciudad. Su configuración lineal sur-norte obedece a un proceso de planeación urbana que se dio de manera espontánea  desde sus primeros años en la segunda mitad del siglo XVI hasta mediados del siglo XX. Su origen fue una calle colonial, trazada sobre un antiguo camino indígena que los españoles llamaron el Camino de la Sal o de Tunja, que llevaba a Usaquén y la Villa de Zipaquirá. El recorrido deja descubrir cómo creció la ciudad y sus diferentes momentos de desarrollo. Puede encontrarse con cafés, tiendas, centros comerciales y, en sus andenes, su rauda vida cotidiana.

Ciudad cosmopolita

Bogotá es una ciudad acostumbrada a recibir visitantes de todo el mundo y ello incluye a los amantes del ciclismo y el running. Por ello, otra opción es recorrerla sobre un caballito de acero o trotando. Con 500 kilómetros de ciclorruta que recorren la ciudad de un extremo a otro es una de las formas favoritas de los amantes del deporte para conocerla desde otra óptica, con múltiples opciones de apreciar la arquitectura, la gastronomía, los museos, sus calles y sus paisajes.

¿Te gustan las actividades en grupo? ¿Necesitas guía? ¿Quieres interactuar con extranjeros? O ¿prefieres un tour a solas, a tu ritmo y gusto? No importa cuáles sean tus preferencias, en Bogotá tienes la posibilidad de hacerlo a tu manera.